
Después de cuatro décadas, un polémico muro que separa las zonas de los ricos de los pobres en Perú tiene los días contados tras una decisión judicial que lo condena a ser derribado. Conocido como el «Muro de la Vergüenza», esta tapia separa a la gente que vive en viviendas en condiciones precarias de las lujosas residencias.